La firma cruceña sugiere piezas hechas con broderie, lino y algodón chiquitano, con detalles pintados a mano, aplicaciones de bordados y estampados.
Si existe una prenda que no ha dejado de reinventarse y vuelve fortalecida y más estilosa cada temporada, esa es el vestido. Es cómoda, fresca, realza la figura y sirve para (casi) cualquier ocasión.
Es una pieza que sí o sí tenés que tener en tu armario y aprovechar su variedad de diseños, en cuanto a largo, corte, tipos de cuello y mangas, y, claro está, la tela que se use para su confección.
En Santa Cruz de la Sierra, la firma Hijos de Ramón sugiere sus vestidos hechos con broderie, lino y algodón chiquitano, con detalles pintados a mano, aplicaciones de bordados y estampados.
Carlos Javier Araúz y Fernando Justiniano, creativos de la marca, realzan la elegancia natural de la prenda y con sus diseños potencian su sofisticación. El toque con pintados y tejidos en algunos de los modelos, son parte del boom artesanal que conquista el mundo fashion en estos días.